miércoles, 17 de febrero de 2010

Despacito

Ayer:


La distancia, la victoria
de haber seguido en pie
al borde del infinito
y haber sobrevivido.
El tiempo que gasté
luchando por resistir
a huracanes y tormentas.
Ha llegado una dulce brisa
y ha dejado mi soledad
convertida en mil ruinas.
Hoy:

Como un callejón sin salida
muero perdido entre esquinas,
recuerdos de besos silenciosos
de momentos que persisten en mi mente
y el dolor que no cesa
No camino por las mismas calles,
son y no son éstas, eran otras
había... esquinas y farolas,
hoy, solo sombras.

No camino las mismas calles,
corro por ellas,
pero tu rostro todavía me persigue.

Demasiado pasado, demasiado corazón,
demasiado de todo hoy, demasiado,
y nada nunca cesa,
no retroceden un ápice las lágrimas,
no se borra una sola de tus despedidas,
no olvido una sola de tus palabras.
No puedo cerrar los ojos.
No puedo mirar nada.
No puedo respirar apenas.

Tú estás aquí.

Y allí.

Y allá.

Más cerca que todo,
más lejos que nadie.
A un estirar de dedos de distancia.
Ayer tan cerca.

Hoy, inalcanzable.

No hay comentarios:

Publicar un comentario